domingo, 13 de octubre de 2019

I Caravaggisti


La realidad es aquello que no desaparece cuando dejas de creer en ella.

Philip K. Dick




Lo explico rápido. Cuando pensamos en el Arte Barroco europeo uno de los dos o o tres artistas que nos viene inmediatamente a la cabeza es Michelangelo Merisi (1570-1610) más conocido como Caravaggio, sobrenombre tomado de la villa del Norte de Italia en la que creció.

Desde luego Caravaggio fue muy famoso en vida y por ello sería lógico pensar, habida cuenta de la importancia que le otorgan en la actualidad los manuales de Arte, que continuase siéndolo inmediatamente después de su muerte, durante las décadas en las que el estilo pictórico que ayudó a eclosionar se convirtió en el canon dominante en el Arte europeo. 

        Sin embargo no fue exactamente así.

domingo, 6 de octubre de 2019

Antes de Facebook


Te contaré un secreto, algo que no se enseña en tu templo: los dioses nos envidian. Nos envidian porque somos mortales, porque cada instante nuestro podría ser el último. Todo es más hermoso porque hay un final. Nunca serás más hermosa de lo que eres ahora, nunca volveremos a estar aquí.

Brad Pitt en “Troya”




Hace tiempo que os tengo abandonados, pero no desesperéis, el blog no va a desaparecer, simplemente al depender de una única persona la publicación de entradas sufre los altibajos que toda común y vulgar vida humana experimenta. Tal es así que, si lo pensáis, este período de vacas flacas que ha atravesado el blog tarde o temprano tenía que ocurrir. Era inevitable. Fueron casi cinco años y medio (un día de estos tengo que organizar una especie de aniversario del blog) primero publicando una entrada casi cada semana y luego una entrada cada mes. Algunas de ellas bastante notables, lo digo con orgullo, así que ya tocaba un descanso que en este caso ni siquiera ha sido descanso porque el silencio se ha debido más bien al exceso de trabajo que a la ausencia del mismo. Es la impertinencia de tener que luchar en esa jungla que es la vida para hacerse con los recursos suficientes para comer cada día y pagar las facturas. Tal fastidio resulta inevitable pero poco a poco hace mella en la capacidad creativa e incluso en el ansia de ejercer tal cosa. A fin de cuentas la más poderosa censura de la historia siempre ha sido la vulgar obligación de tener que ganarse la vida para, solo así, luego poder disfrutar durante unos instantes del funesto vicio de pensar. 

Dicho lo anterior a modo de liviana disculpa os informo que para mi regreso voy a escoger algo fácil, un clásico hilo de fotos antiguas que tanto me gustan a mí pero no tanto a vosotros, lo se. En todo caso intentad disfrutar de esta pequeña recopilación de hoy hasta que nuevas entradas permitan recuperar el ritmo a la página, esperemos que sin necesidad de esperar otros casi cuatro meses.